Guatemala

Guardia de seguridad padece alteración mental

Mynor Guevara Tebas, agente de seguridad privada en la farmacia Galeno, zona 1, donde mató a una persona, padece de  disminución de sus capacidades mentales, por lo que el Ministerio Público (MP) pedirá un proceso especial para que enfrente a la justicia.

Mynor Guevara  Tebas, guardia de seguridad que accionó su arma contra Patricia Samayoa.

Mynor Guevara Tebas, guardia de seguridad que accionó su arma contra Patricia Samayoa.

Guevara Tebas trabajaba como custodio de la referida farmacia cuando le disparó con su escopeta a Patricia Eluvia Samayoa Méndez, el 3 de julio pasado, quien llegó a comprar medicamentos.

Según el informe del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, el sindicado padece de esquizofrenia, por lo que el caso penal tiene un trato distinto.

El órgano investigador presentó la acusación formal en el Juzgado Tercero Penal, por  asesinato y asesinato en grado de tentativa, y la audiencia se desarrollará mañana en ese juzgado para resolver si irá a juicio, pero no por la vía común.

Debido al padecimiento  mental del sindicado, el MP pidió que enfrente debate basado en el artículo 484 del Código Procesal Penal.

Ese artículo establece que cuando el MP, después del procedimiento preparatorio, considere que solo corresponde aplicar una medida de seguridad y corrección, requerirá la apertura del juicio en la forma y las condiciones previstas para la acusación  en el juicio común, indicando también los antecedentes y circunstancias que motivan el pedido.

Atrincherado

Samayoa Méndez, el 3 de julio pasado, ingresó en la farmacia para comprar medicamentos y fue atendida, pero segundos después el guardia le disparó con su escopeta.

Al arribo de los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC), Guevara se negó a entregar su arma e incluso les disparó.  

Hirió a Obed Ramírez Galeano, agente de la PNC, y al fiscal del Ministerio Público (MP) Javier Palencia.

Tras varias horas de negociación con la Policía, Guevara se entregó.

Aseguró que intentó “repeler un asalto”.

Era su primer día como guardia en la farmacia y trabajaba en la empresa Shield Security.

Días después del crimen fue suspendida esa compañía, ya que no contaba con el permiso de operación que extiende el Ministerio de Gobernación.

Desde el 2010 entró en vigor el decreto 52-2010, que obliga a las empresas de seguridad privada a readecuarse y capacitar a su personal.
Sin embargo, para la Dirección General de Servicios de Seguridad Privada, esa empresa no tiene ningún agente certificado.

Profesional

Defensora de las mujeres

El jueves 3 de julio, Patricia Samayoa Méndez,  terminó su trabajo después de las 17 horas, como casi siempre lo hacía. Laboraba desde hacía poco más de 14 años para la municipalidad capitalina, en la Oficina de la Mujer,  en el área de Ciudad y Género, de la cual fungía como coordinadora.

Ella se licenció en Planificación Social en Costa Rica, y años después obtuvo una maestría en Desarrollo Social, en Honduras, países en los que vivió durante varios años.

Esa experiencia le valió para coordinar los proyectos para erradicar la violencia contra la mujer que son impulsados por la comuna. Los planes estaban enfocados en barrios y asentamientos donde el índice de criminalidad es alto.

Allí, Patricia escuchaba, con paciencia, a decenas de mujeres que eran víctimas de violencia familiar. Cada caso era especial para ella.

Crimen

3 de julio  pasado ocurrió el crimen contra la profesional.

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